viernes, septiembre 26, 2008

Two Films

Entre ayer y hoy día fui a dos pre-estrenos de pelis chilenas.
Un documental llamado
"La Batalla de Plaza Italia", del periodista Renato Villegas, y la última película de Cristian Galaz (junto a Andrea Ugalde), "El Regalo". El primero es un documental que cuenta la historia que tuvieron los vecinos de Plaza Italia, específicamente de las Torres Turri, organizándose para oponerse al levantamiento del monumento de Jaime Guzmán en tal lugar. Una muy buena historia, que está bien contada, con una voz en off, en primera persona; que delata una buena investigación, y una dedicación de corazón de su realizador. Lo que puede jugar en contra de esta cinta, es que cuando la historia comienza a ponerse buena, el proceso de pseudo lucha se corta estrepitosamente por la decisión de la UDI de cambiar desde Plaza Italia a Las Condes el lugar de emplazamiento del homenaje a Jaime Guzmán. Eso deja con gusto a poco, porque una cámara, un montaje y un relato inteligente me hicieron sonreír bastante, principalmente por el sarcasmo utilizado. De todas formas, el realizador decidió resolver, asumiendo que su historia no sería la gran lucha que él había imaginado, sino une petite histoire, y darle fin de una manera inteligente. Que se te acabe la historia en la mitad del documental; gajes del oficio, que suelen pasar.

La segunda peli, es "El Regalo", la cual tenía ganas de ver hace un rato, porque ya había visto el trailer en el cine unas cuantas veces. Lo que impresiona a primera vista en este film es sin duda su elenco: Delfina Guzmán, Gloria Münchmeyer, Julio Jung, Nelson Villagra, Tito Noguera y Jaime Vadell (trío de viejos minos). Todos juntos y revueltos, Shan, shan. O sea, sólo eso puede llevarte a verla. La historia no tiene complicaciones existenciales. Es un 'paseo', estilo gira de estudio, de estos personajes a las termas de Chillán, con el fin de pasarlo bien, y hacer que uno de ellos pase la pena (pero sobre todo el miedo) de volverse jubilado. Y, sin duda, se divierten. Y uno también con ellos. No es por solidaridad de género, pero mis favoritas acá son las mujeres, en lo que a actuación se refiere. También tiene que ver con que sus personajes son más ricos, menos planos. Nelson Villagra dijo en el estreno que era una película para ver lo que hacen nuestros abuelos y padres cuando no están solos, y le encuentro toda la razón. Los abuelos de ahora, que pasean, que viajan, que vuelven a enamorarse, que se han liberado del peso que ser viudos, separados, solteros o simplemente tener más de 65 y disfrutar los años que tienen como si tuvieran veinte o treinta. Es una peli linda, con una intención de reivindicación de la tercera edad (algo que adoré, porque amo los abuelos), de bella factura, preciosa foto y cámara (David Bravo está detrás de ello) y buena música también. Si tuviera algo que decir al respecto, es que algunas partes del guión las encontré muy explícitas; me faltaron silencios, miradas, detalles, algo que, supongo (y espero), tengamos veinte o cien años, no se nos va nunca. "La Batalla de Plaza Italia" pueden verla en el Centro Arte Alameda (ojo que estará poco en cartelera), y "El Regalo" desde el próximo jueves en su cine favorito. Excelente idea para llevar a su papá, mamá o abuelo(a).

jueves, septiembre 25, 2008

¿?


La Shidi salió a buscar trabajo.
Porque el sueldo de doble investigadora no le alcanza para cruzar el océano.
Entonces fui a una entrevista. Un señor de cabeza cana y muy amable semblante me dijo:
"Ud. es muy buena para el cargo... el problema es que tiene muchos estudios"
Por un segundo pensé que había escuchando mal. Porque uno desde pequeñito piensa que por tener más y mejores estudios, tendrá opciones a más y mejores trabajos.
Pero la vida es tan relativa.
Entonces el amable señor terminó la entrevista diciéndome:
"Muy interesante su postgrado, me encantaría contratarla".
Pero parece que el mercado le dice otra cosa. El cruel y feo mercado me puso un timbre en la foto del currículum: "Sobrecalificada"
Cuec.

sábado, septiembre 20, 2008

Through

¿Acaso no tiene Usted el lado romanticón de andar siguiendo gitanas (o gitanos en mi caso),
por donde sea, hasta localizarlas(os)?
¿Quién no?
El mundo se mueve por eso.

Y por alcanzar en una braceada atlántica
el abrazo necesario.

LOVE WILL COME THROUGH - Travis

If I told you a secret
You won't tell a soul
Will you hold it and keep it alive
Cause it's burning a hole
And I can't get to sleep
And I can't live alone in this lie

So look up
Take it away
Don't look da-da-da- down the mountain

If the world isn't turning
Your heart won't return
Anyone, anything, anyhow

So take me don't leave me
Take me don't leave me
Baby, love will come through it's just waiting for you

Well I stand at the crossroads
Of highroads and lowroads
And I got a feeling it's right

If it's real what I'm feeling
There's no makebelieving
The sound of the wings of the flight of a dove

Take it away
Don't look da-da-da down the mountain
If the world isn't turning
Your heart won't return anyone anything anyhow...

So take me don't leave me
Take me don't leave me
Baby, love will come through it's just waiting for you

So look up
Take it away
Don't look da-da-da- down

If the world isn't turning
Your heart won't return anyone anything anyhow...

So take me don't leave me
Take me don't leave me
Baby, love will come through it's just waiting for you

Love will come through
(x 3)

martes, septiembre 16, 2008

Septiembre


En los inicios de la primavera el mundo se divide:
Los que salen de su casa antes de las nueve de la mañana, y los que salen después.
Los primeros aún llevan pañuelos al cuello, chaqueta y zapatos enteros;
mientras que los segundos, llevan polera, zapatos descubiertos, y lentes de sol

viernes, septiembre 12, 2008

Cuerpo


Hoy fui al espectáculo "Alegría" del refamoso "Cirque du Soleil".
No contaré el show, porque es harto mejor verlo, y si no se puede, Sr. Sra, busque el DVD, o en Youtube, y podrá ver Ud. mismo lo perfecto que es todo ahí. Ningún detalle al descuido. Algo que se agradece infinitamente por cierto.
Mi reflexión es otra.
Quedé impactada por el tema del cuerpo. Quizás es por la víspera del seminario de Foucault que habrá pronto, que el tema me ronda tan de cerca, pero es que si te pones a analizar desde ese prisma todo el show del Cirque, es impactante como el cuerpo resulta un estandarte, herramienta, objeto de culto, etc.
El circo en general es un espectáculo que rodea al cuerpo: Los músculos y la fibra de los acróbatas, el disfraz de los comediantes, el brillo de todos los participantes del mismo. Pero el Cirque, que además se planteó desde el principio como un show exento de animales, el tema del cuerpo resulta tan fuerte que impacta.
No sé cómo más podría profundizar esta reflexión. Quizás en el cuestionamiento de tanto culto al cuerpo; o quizás en la pregunta de cuáles son los límites de nuestro propio cuerpo.

Mi hermana hace clases de computación a personas de la tercera edad. Hoy llegó contando que una abuelita, que guarda muchas medallas por su pasado de maratonista, se inscribió en el curso porque necesita con toda el alma, activar su parte intelectual. Fue mucho cuerpo durante toda su vida.
Es curioso para mí encontrarme con esa faceta, porque recuerdo muy bien alguna clase de primer año del pregrado, cuando un profesor nos contaba cómo su maestro, de tanto leer, de tanto pensar, de tanto escribir y hacer ejercicio intelectual, el cuerpo se le había estropeado. No le respondía. Y entonces comenzó a fallarle todo; todo el gran sistema que es el cuerpo. Me marcó tanto, porque justamente yo estaba segura que quería desarrollar muchísimo más mi cabeza que mis bíceps. Hasta entonces.

No puedo dejar de ver flashes de esos cuerpos volando por los aires, con un control opulento sobre cada movimiento, sobre cada centímetro de musculatura. Recordaba también las competencias en las recientes olimpíadas de Bejing.
¿Cómo mantener un equilibrio, que no te lleve ni para el lado de un culto deformatorio del cuerpo, y un ejercicio intelectual que te mantenga vigente sin volverte un viejo o vieja de mierda?
Me parece que los orientales saben bastante de eso.
Mientras tanto, creo que soñaré con mezclas entre los documentales de Leni Riefenstahl (una gran rayada con el tema del cuerpo), el Cirque du Soleil, y el señor Foucault mirándolo todo, apoyado con su mano en la barbilla !

PD: Gracias Cata por retarme por mi floja actualización del blog !