Lo Que es la Externalidad Positiva

Personalmente creo fielmente en la filosofía del vaso medio lleno.

Y dígame si no le han pasado cosas buenas con el Transantiago. Vamos, no sea pesimista. Yo sé que saca los choros del canasto a veces, sobretodo hace unos meses atrás. Pero mire, yo le cuento dos.

1.- Cuando había que pagar cada una de las micros a las que me subía, pensaba y repensaba mi ruta. Era casi imposible desviarse, porque eso significaba pagar una micro más; micro y metro, sólo cuando estaba atrasada.

Ahora me dejo llevar. La micro que pase, me sirve. ¿Dígame si no es lindo? Hoy día tomé una micro en la Alameda, sin mirar el número, y ups, dobló. Pero en fin, esperé el paradero siguiente, caminé por una calle que no caminaba hace tiempo, (hasta encontré una sombra), tomé otra micro. ¿Qué más lindo que dejarse llevar? Casi como bailar tango.

2.- La segunda, sólo por ser avara con los ejemplos, uno llega al paradero. Pregunta al que está ahí si la micro pasó hace mucho. Entonces te pones a conversar. Y fluye la conversación, y como esta ciudad es pequeña, siempre hay algo común, aunque sea el color favorito. Y pasa la noche, los autos, tú conversas amenamente sintiendo incluso un poco de frío porque andas con chalas y falda por el calor del día. Incluso te encuentras un guapo o guapa si andas de suerte.

La otra vez se subió un cantautor, cantó sus canciones criticando el sistema de transportes, y se produjo un instantáneo debate ahí mismo, en la superficie de la oruga de la micro, donde todos íbamos parados mirándonos de frente.

Que me digan lo que quieran. Pero que los santiaguinos hablemos en la calle, conversemos un poco de lo que nos pasa, nos ríamos del asunto, no puede ser sino positivo.

Ya nos estábamos quedando mudos de tanto trabajar y pagar cuentas.

Ser amable cuesta tan poco por la cresta, mire la ciudad llena de vida a su alrededor.